Se acerca el mes en el que muchas niñas hacen su Primera Comunión y, con él, los quebraderos de cabeza de sus mamás para conseguir que las peques vayan especiales ese día.
En los últimos años hemos visto cómo los vestidos clásicos de princesa han dado paso a los de corte más vintage, perfectos para combinar con tocados, prendidos, coronas y diademas para el pelo.
Pero a veces hay tanta variedad que no es fácil decantarse por un accesorio ¿verdad? ¿Cómo escogemos? Lo primero que hay que pensar es en la niña y, por supuesto, en su pelo. Si lo tiene largo y queremos que lo lleve suelto, la mejor opción es, sin duda, una coronita como esta de hortensias preservadas en tonos beige y blanco que tanto nos gusta. Es para niñas atrevidas y que les gusta sentirse diferentes.
… una de margaritas naturales con paniculata. Sencilla a la par que delicada :)… Sin duda, una de nuestras favoritas.
…o una de aires más vintage de hortensia preservada y paniculata, perfecta para cualquier perfil de niña y tipo de vestido. Ese punto romántico que todas llevamos dentro.
Si, por el contrario, preferimos hacerle a la pequeña un recogido, tenemos la opción de elegir entre peinetas y pinzas que ayudan a dar un toque especial y diferente en trenzas flojas, moños o cualquier peinado que se nos ocurra, como este realizado por nuestra querida María Baras de Salón Cheska.
…una pinza ladeada de eucalipto y hortensia preservada…
…o podemos combinar dos peinetas de hortensia preservada y flores secas a modo de media corona.
Como ves son muchas las alternativas con las que dar un toque especial y único al vestido de comunión. ¡Y se pueden personalizar! ¿Cuál elegirías tú?